Por Reihaneh Hajibeigi
29/10/2015
Los sucesos de Karbala son algo más que palabras en la página de un libro de historia y la tragedia aleccionadora que se produjo en el día de Ashura (el décimo día de Muharram) debe ser conmemorada de una manera especial. El quinto Imam del Islam, el Imam Mohammad al-Baqir (La Paz sea con él) dijo: «Si nuestros Shias realmente hubieran sabido lo que sucedió en Karbala, ellos habrían muerto de pena.» Nunca seremos capaces de experimentar la gravedad de la tragedia de Karbala, pero podemos llevar los eventos a la vida tanto como sea posible.
Cada año en la noche de Ashura, nuestra comunidad local abre la noche del duelo con una vigilia con velas dirigida por jóvenes. Las vigilias con velas son organizadas por una miríada de razones, pero es una forma de honrar la vida de los martirizados. La vigilia es un humilde intento de traer a la vida los sentimientos de Ashura para la juventud. Con la amenaza constante de ser estigmatizados como «extremistas”, «radicales» acechante sobre nuestras cabezas, mantener una identidad islámica en Occidente es difícil, pero a través de programas interactivos como la vigilia, en efecto permitimos a los niños vivir su identidad islámica. En lugar de sentarse como observadores pasivos, los jóvenes toman posesión del evento en intentos de construir su inversión en la comunidad, así que un día cuando sea su momento, ellos estarán dispuestos a llevar a su comunidad en la dirección correcta.
La vigilia implica Corán, poesía en diferentes lenguajes, discursos interactivos y otras plegarias en honor del Imam Husein (La Paz sea con él) y su amada familia que fueron martirizados en ese fatídico día. Gran parte del luto tradicional de Muharram implica gritos emocionales fuertes y vívidas descripciones de las calamidades que se cobraron la vida de la familia y compañeros de AhlulBayt, pero esta vigilia con velas contrasta el duelo clásico con una forma silenciosa y sistemática de la tristeza. Los cánticos de «Labayk ya Husayn» se respira en los niños, mientras que ubican sus velas alrededor de la tienda de campaña del Imam Husein (La Paz sea con él), y con esto, los niños juegan de nuevo un papel activo en honor a su legado en lugar de sólo escuchar hermosos sermones y compartir lecciones y moralejas de las vidas de los Imames y sus familias.
Cuando el Imam Husein (La Paz sea con él) libera a sus compañeros en la noche de Ashura antes de que la sangre se pierda inevitablemente, no se sabe el grado de confianza que él tendría de no estar solo en la mañana de ese fatídico día. Sin embargo, mientras llegaba el amanecer, los verdaderos compañeros del Imam estaban sin dudarlo de pie a su lado. Nunca vamos a lograr la grandeza de los Profetas Sagrados o de los Imames, pero podemos trabajar para ser lo más fieles y dedicados como los compañeros que acompañaron a la familia bendita del Profeta (La Paz sea con todos ellos) a través de todas sus pruebas y tribulaciones. Podemos aprender de la lealtad de hadthrat Abu Fadhl Abbas; podemos aspirar a la fuerza de Sayyida Zainab; y podemos trabajar por la disposición a servir a su amo sin reticencias como los jóvenes de Banu Hashim, la paz y las bendiciones sean con todos ellos.
Cuando les decimos a los jóvenes que canten «Labayk ya Husayn», les estamos diciendo que lo hagan con tanta convicción y con la creencia de que el líder de nuestro tiempo, el Imam al-Mahdi (aj), puede escuchar, no importa en qué parte del mundo él este. Queremos que sepan que no están desconectados de estas historias que sucedieron hace casi 1.400 años; queremos que sepan que hay una posibilidad real de que algún día podrían ser llamados a defender la verdad y la justicia; queremos que estén preparados para responder a la llamada del Imam (aj) cuando llegue ese momento.
Reihaneh Hajibeigi: Reihaneh es una graduada de la Universidad de Texas en Austin con un grado en Periodismo Multimedia. Es una escritora y editora freelance con presentaciones en Occupy.com, Truthout y Wilayah News.
Traducciòn: LAILA HAKIM para UMMA
