Los Desafíos que enfrentan las Mujeres Musulmanas en las Comunidades Contemporáneas

Por Dr. Ja’afer Abdulsalam
Profesor de Derecho Internacional y
Secretario General del a Asociación de Universidades Islámicas

Traducción al inglés: Anas Al- Taleb Abdulrahim
Traducido al español para U.M.M.A por Fabiana Ríos

 

Prefacio

Actualmente, la mujer musulmana enfrenta una mirada de desafíos en la comunidad en la que habita en todo los países Islámicos, la razón para ello es la asimilación a la cultura occidental y a su tiranía sobre nuestras vidas. El occidente ha anunciado los derechos de las mujeres y ha llamado a la completa igualdad entre mujeres y hombres, muchos de nuestros pensadores se han pasado hacia esa tendencia, tales como Qasim Amin, Taha Hussein y Mahamud Azemi, quienes han pintado a la mujer en un cuadro encantador sobre la posibilidad de salir del hogar y dejar de lado el Hijab, tan pronto como las mujeres habían salido de la revolución de 1919, con los hombres o sin ellos, comenzaron a ocupar muchas posiciones en la administración del gobierno. La revolución de Julio, en Egipto, llevó adelante fuertemente esta posición, a tal punto que las mujeres comenzaron a participar de la vida política, a ser nominadas para posiciones públicas y a ingresar a consejos legislativos, la revolución llegó tan lejos como para señalar a una mujer como ministro en los estados superiores, o dos ministros en un ministerio, por no mencionar el otorgamiento de oportunidades laborales, incluidos los judiciales, se le aseguró, incluso, trabajo en los escuadrones, aún cuando no es fácil para la mujer llevar adelante un trabajo como el de policía, y hoy no existe posición gubernamental alguna donde no haya una mujer.
También notamos cómo las leyes son dirigidas a servir a los derechos de las mujeres y las leyes del estatus personal en nuestros países están apuntadas a facilitar el trabajo a las mujeres, comenzando en 1925, cuando las leyes relativas al estado personal fueron aprobadas y estos estatutos no siguieron, por sí mismos, a sector alguno, y fueron en contra del sector de Hanafi, que comúnmente utilizaba en relación a los estados personales, luego siguieron leyes similares, que cambiaron hacia la misma dirección, la última de las cuales fue hecha en 2003, y que la gente denominó “la ley del destronamiento” y es una ley que codifica una sección de la jurisprudencia islámica. Esta ley da a la mujer igual derecho que al hombre para finalizar un matrimonio, siendo el juez quien decide, antes que lo que la esposa desea. Podemos decir que no existe diferencia alguna entre el hombre y la mujer, en cuanto al goce de los derechos y libertades, en la mayoría de los países islámicos en la actualidad.1
A pesar de esto, Occidente no ha cesado de interferir en nuestros asuntos más privados, por ejemplo: el pedido de reforma política de los Estados Unidos, que abarca tres áreas: primero la educación, que sería la reforma de la educación en los países islámicos que se enfocan especialmente en la educación religiosa, que la percibe como basada en el odio al prójimo y al aliento por la Jihad, y que ve en muchas aleyas del Corán, el espíritu de la Jihad y el odio por los demás.
La segunda área tiene que ver con la mujer, quienes según ellos son maltratadas en nuestros países, a cambio les quitan sus hijos y los crían en el extremismo y en el terrorismo a causa de la supresión y opresión infligidas sobre ellas.
En cuanto a la tercera área, se refieren a la educación política, ya que creen que los sistemas políticos en los países islámicos son despóticos, y en los que no existe participación política bajo la forma democrática.

 

La ironía acerca de esta teorización acerca de la condición islámica es que, desafortunadamente, fue preparada por pensadores que escribieron libros sobre el Islam y su historia, tales como: Bertrand Lewis, Foukayama y Lewis Huntington, quienes son conocidos por tener malicia y odio por el Islam, no sé por qué. Consideran que la civilización occidental no tiene más enemigo que el Islam, y si la civilización islámica no es eliminada, las consecuencias serán funestas, el asestar duros golpes a los regímenes islámicos en la clave para mantener la civilización contemporánea occidental y norteamericana y liberarse de lo que ellos denominan el “terrorismo islámico”.

En realidad, Norteamérica junto a sus aliados occidentales, introdujeron programas de reeducación para la mujer musulmana como ellos deseaban, algunos regímenes responden a ellos, especialmente en los países del Golfo y en algunos países en los que algunas mujeres fueron enviadas a Estados Unidos para ser formadas por la línea norteamericana, por no mencionar el hecho que la asimilación a la cultura occidental se ha filtrado en las universidades y escuelas, un grado de la universidad norteamericana se ha convertido en el más elevado en nuestro país, de este modo cientos de escuelas privadas y universidades han sido abiertas en los que el inglés es el único idioma de enseñanza en nuestro país islámico.2
Esta tendencia ha dado lugar a un cambio en los desafíos y problemas enfrentados por las mujeres musulmanas, y los que, desafortunadamente, prácticamente abolieron lo que eran cimientos fijos en nuestras comunidades, debemos hacer sonar la alarma para que el estado, nuestras familias y las comunidades no pierdan lo que tuvieron hasta hoy. Es la oportunidad de reunir en Irán, que desde mi punto de vista, se ha convertido en el país islámico más crucial que enfrenta las oleadas de ataques occidentales sobre nuestras entidades y creencias, de este modo, hablaré sobre los desafíos que enfrentan las musulmanas como resultado de la asimilación a la cultura occidental y a la hegemonía sobre nuestras comunidades islámicas. Trataré los desafíos en relación a la familia en la primera parte, y en la segunda hablaré acerca de los desafíos relacionados con lo laboral.

 

Primera parte

Desafíos relacionados con las familias

El Islam convierte a la familia en la célula principal de la comunidad islámica, que reposa en una esposa, un esposo, los hijos y las diferentes clases de relaciones entre ellos, sobre las bases religiosas, en donde la compasión y el afecto, sobre las que habla el Glorioso Corán, prevalecen.
El Exaltado Dios dijo: “Y entre sus signos está el haberos creado esposas nacidas de vosotros mismos, para que os sirvan de quietud, y el haber suscitado entre vosotros el afecto y la bondad. Ciertamente, hay en ellos signos para gente que reflexiona”.(Sura Al- Rum, 21)
Además del afecto y la compasión, la familia musulmana tiene estos componentes:

1- El esposo está por encima de la esposa y es quien gobierna. Es un prerrequisito para dirigir a la familia que el esposo y la esposa deban tener la supremacía de la autoridad familiar, que le otorga a él el derecho a educar, a formar y guiar a la familia.
2- El esposo es quien está, por lazos religiosos, obligado a proveer a su esposa y a la familia en general. De esta forma la supremacía es consumada y tiene base, el Exaltado Dios dice: “Los hombres tienen autoridad sobre las mujeres en virtud de la preferencia que Dios ha dado a uno sobre otros y de los bienes que gastan.” (Sura Al- Nisa 34).
3- La cabeza de la familia tiene la autoridad para disciplinar a su esposa y familia. Esta autoridad disciplinante es una especie de arte de la vida conyugal, el éxito para manejar la familia gira alrededor del buen uso de la autoridad sin excesos o lasitud.
4- La cabeza de la familia juega el rol principal en formar, educar y mejorar la familia.
5- Los hijos permanecen unidos a la familia hasta que maduran y no se mantiene apartados de ella fácilmente.

En tanto que la hija permanece con la familia hasta su matrimonio al punto que su padre prepara y arregla su hogar, y por supuesto, comparte con ella la elección del esposo, la relación entre el esposo y la esposa se basa en la permanencia y si surgen problemas entre la pareja matrimonial, la disputa debe ser resuelta a través de ciertas formas y los parientes pueden actuar como mediadores. El matrimonio puede disolverse por medio del divorcio, que está prácticamente en manos del esposo o puede ser decidido por jueces, basados en determinadas razones legales, que fueron dejadas de lado por ulteriores leyes en Egipto, se decidió por el esposo, no sea que la relación matrimonial se destruyese por razones triviales.
La influencia de la asimilación a la cultura occidental sobre la familia musulmana se tornó bastante obvia en los últimos tiempos, quizá el mayor de los efectos negativos que resultó de esta intensa campaña sobre los musulmanes puede ser resumida de la siguiente manera:

  • Trabajar en la desestabilización de la familia, al introducir legislaciones sobre la base constante de apuntar a deshacerse del sagrado vínculo de la vida matrimonial, y si no se objetan las razones para el pedido del divorcio a través de los tribunales, por los motivos sobre los que no extenderemos, el sistema de destronamiento en la ley egipcia fue realizado de tal forma que trastocó el sistema familiar, las mujeres recurren a él por las razones más nimias, incluso se ha vuelto común que una mujer amenace a su esposo y a su familia y aún a su propia comunidad con recurrir a él.3
  • A pesar de la solidez de la base religiosa que le otorga a la mujer el derecho a elegir un marido, se observan numerosos casos en los que las muchachas desobedecen a su padre y a la familia, a través de matrimonios no oficiales, acerca de los cuales el padre nada sabe, que se han vuelto muy comunes4 .
  • Cuando el veredicto para la disolución del matrimonio aumentó, se dice aún, que muchos estudiantes universitarios se casan teniendo sólo a sus compañeros de clases como testigos de estos contratos informales que no están procesados, y aún si lo estuviesen, lo están en un simple papel que el marido a menudo niega, lo que ha vuelto a esto en un sinnúmero de problemas.
  • El divorcio ha aumentado en muchos países islámicos, incluyendo a Egipto, acerca del cual estoy hablando, a causa de la asimilación a la cultura occidental y de los medios masivos de comunicación occidentales, que no respetan la familia y alientan a las esposas a liberarse de su esclavitud, y a la irresponsabilidad, lo que tiene un gran efecto en todo eso.
  • Vemos que la independencia económica de las mujeres ha contribuido grandemente a la degeneración de la familia, porque las mujeres trabajan y obtienen ganancias, en algunos casos mayores que las de sus esposos, y el concepto de supremacía que dominan muchos hombres, los afecta fuertemente y les otorga a las mujeres el sentimiento de que no necesitan a sus esposos y esto lleva fácilmente a disolver el matrimonio.

 

Uno de los desafíos más serios que enfrenta la mujer musulmana y el estado en Egipto, en general, es que la juventud rehúye del matrimonio y de formar familias. Este fenómeno es atribuible a una miríada de razones, en las que la más importante es la financiera, ya que muchos jóvenes carecen del ingreso suficiente para afrontar las cargas del matrimonio y sus necesidades financieras. Más aún, los hábitos extraños que han prosperado en las comunidades, en términos del costo de las fiestas a causa del matrimonio, con las que el Mensajero de Dios no hubiera estado complacido, sumado a otros inventos occidentales. Estas son las razones relacionadas a los trastornos sociales donde hay clases sociales altas y bajas que son irreconciliables, de manera similar las mujeres han ingresado en el campo laboral y se han convencido de adquirir la autorrealización en lo laboral, aún a expensas de su vida social, no caben dudas acerca de que la mujer sufre todo esto, desde su soledad, desde la carga que la sociedad pone en ella para su propia manutención, en donde se ha vuelto común ver a una mujer vivir sola en su casa y oímos muchos ejemplos de agresión contra estas mujeres. Se ha vuelto común encontrar mujeres, y en algunos casos hombres en los hogares de sus mayores, que no pueden soportar los hogares de las familias en las que la solidaridad desapareció, luego de haber estado en esas casas o son tenidos allí por sus familiares más próximos.
La familia es un tejido social importante, pero recibe golpes de todos lados, y tememos vernos ante una crisis de la familia y perder la solidaridad social y la integridad como sucedió en occidente.
El fenómeno de eludir del matrimonio en occidente ha dado lugar a un a comunidad temerosa, la tasa de fertilidad en algunos países europeos se ha vuelto nula o prácticamente nula, las comunidades occidentales han envejecido a causa de que los segmentos dominantes son los de los mayores. Aunque no hemos llegado a este punto, no estamos alejados de él.

La difusión de la fornicación en nuestros países se ha tornado desconcertante. Los jóvenes no se casarán si hallan un modo fácil de satisfacer sus instintos, con un bajo costo y sin responsabilidades, lo que constituye el verdadero mal que difundió occidente y llevó a las consecuencias negativas de las que hemos hablado anteriormente.
Los desafíos acerca de los que he hecho mención en relación a las mujeres y las familias, son desafíos que enfrenta la comunidad islámica toda en un mayor o menor grado en la actualidad, el desafío de los jóvenes para no casarse, el desafío de la discontinuidad de la familia y la necesidad de tener la libertad para vivir sin una familia o de evitar rápidamente la responsabilidad de la familia y el matrimonio a través de numerosas influencias, la más importante de las cuales es la propaganda occidental y la hegemonía con que en cada tanto nos deslizan ideas acerca del matrimonio ideal, la libertad sexual, el aborto, la inversión de los roles sexuales entre el hombre y la mujer a través del género, el gradual alejamiento de la institución matrimonial y familiar, la fácil separación por parte de la mujer, del mismo modo que el hombre. Desgraciadamente estas son ideas que la convención de las Naciones Unidas promulga para la población, y más de una comisión de las Naciones Unidas trabaja para diseminarlas, a veces amenazan a países que no acatan la orden. El propósito de esto es difundir el deterioro, le adulterio y la corrupción, cosas que el Glorioso Corán ha exhortado comp. Peligrosas para nosotros. El Dios Todopoderoso dice: “Dios quiere volverse a vosotros, mientras que los que siguen lo apetecible quieren que os extraviéis por completo”(Sura Al- Nisa 27).

 

Segunda parte

Los desafíos relacionados con el trabajo

Las mujeres han salido a trabajar en la mayoría de los países islámicos, han demandado y aún demandan derechos matemáticamente iguales, es decir, desean derechos, a cambio de los derechos que los hombres gozan, sin tener en cuenta las diferencias entre hombres y mujeres. No caben dudas que esto ha creado numerosos problemas y desafíos para las mujeres.
De cualquier modo, en las sociedades occidentales, las mujeres tienen la responsabilidad de la crianza y cuidado de los hijos, como también las tareas domésticas y preparar todo para una vida compartida con sus esposos, sus hijos y consigo mismas, es difícil hallar hombres que compartan estas grandes cargas. Ahora que las mujeres trabajan, se ha vuelto muy difícil conjugar los requerimientos y necesidades laborales con aquellos del hogar y la crianza de los hijos, lo que significa un gran obstáculo para la continuidad de solidez de la vida familiar. De hecho hallamos legislaciones que ayudan a las mujeres a reconciliar los requerimientos laborales con los familiares, a través del recorte de las horas laborales, el pago de la licencia por maternidad por un tiempo determinado para criar a los hijos, pero todo esto a costa del trabajo, por esta razón observamos que en el sector privado no se emplea a las mujeres tan fácilmente, y por lo que más utilidades gubernamentales sufren al tener empleadas a mujeres, lo que es otro problema.
De este modo, fueron pensadas soluciones alternativas, la más fácil de todas es que la mujer retorne al hogar y abandone la idea de trabajar, pero el solo ingreso inadecuado del hombre para mantener a la familia vuelve muy difícil a esta solución, más aún, las mujeres quedan bajo una presión externa y cuando alcanzan una etapa avanzada en sus carreras, hallan muy difícil sacrificar sus carreras, de este modo, de esta forma una grieta se abre en la familia en las que el hogar y los hijos son las víctimas.
Necesitamos una cultura para la comunidad en la podamos hacer que el hombre ayude a la mujer con las cargas del hogar y en la que la mujer pueda elegir trabajos fáciles que no le quiten la mayor parte de su tiempo, de modo que puedan conciliar las necesidades del hogar y la familia, que tiene precedencia, con las del trabajo. Desearíamos poder tener la clase de trabajo que pueda ser realizado desde el hogar, que son las industrias que necesitan de las delicadas manos de las mueres en el hogar. Vemos en los países de Asia del Este al frente de los que se halla China, como el ensamblaje de calculadoras, relojes, adornos y también comidas.
El principal desafío enfrentado por la mujer musulmana en nuestro país es el realizar las mismas tareas en el gobierno y otros sectores privados, de este modo molestan al hombre y son molestadas en cada lugar, transporte público, cuando se sienta cerca de un hombre en oficinas y se mezcla completamente con ellos en el trabajo y en todo lugar. Una mujer que trabaja mucho tiempo pierde de vista el cocinar para su familia, que depende de las comidas rápidas, los niños no tienen quien los cuide, las llaves de la casa quedan en el dintel de las puertas para que el niño que llegue primero, las niñeras juegan una gran papel en nuestras casas, de este modo las casas orientales han perdido algo de su principal componente en la importancia del rol creativo del ama de casa en la crianza, elección y preparación de las comidas para complacer al esposo y la familia.
Este desarrollo ha dado lugar a un nuevo desafío enfrentado por la comunidad y las mujeres, como la mujer ya no es aquel ser humano delicado que atrae al hombre y que lo consuela, sino que tiene actitudes que la hacen parecer un hombre, se muestra seria y estricta para hacer un buen trabajo y para mantener a distancia a los enfermos, que hay bastantes entre nosotros, de ella. El hecho de que la mujer que trabaja trata de mantenerse a la par de sus colegas de trabajo y la difusión de ideas tales como mantener esta clase de amistades entre colegas pone a la comunidad en un serio predicamento, de aquí que familias enteras se rompen porque la esposa cae presa de un hombre fraudulento que la seduce para que deje a su esposo y a su familia y para que conviva con él con o sin matrimonio, desgraciadamente este se ha vuelto un fenómeno con el que tenemos que vivir.
Uno de los desafíos que enfrentan las mujeres en el trabajo es vestirse y compensar a los demás, no es fácil para una mujer ocultar su carácter o sumisión al hablar mientras trabajan, especialmente si es un trabajo simple que no lleva mucho tiempo, por no decir algo acerca de una mujer que se sienta próxima a un hombre que es seducción para él, es algo por lo que la familia paga un alto precio y augura la ruina, como las mujeres y los hombres están predispuestos al deseo recíproco, que no es a menudo reemplazado con colocar barreras endebles o débiles avances preventivos.
Existen desafíos más serios enfrentando a las mujeres en el momento presente, especialmente la globalización, que implica la potencialidad de comprar y vender todo además del patrón de consumo que impone la globalización, que hace que cada sociedad se rinda a esta a raíz de publicitar productos y una total sumisión a la publicidad, e incluso las mujeres son productos utilizado en publicidad.
El cuerpo de la mujer y su atracción se han convertido en el principal medio de publicidad. Está más allá de toda duda que el inversor y vendedor occidental no se interesan por el cuerpo de las mujeres, ya que ha permitido retratar mujeres desnudas sin ningún pudor, como ha aparecido en las imágenes de famosos pintores y escultores occidentales, en tanto que el Islam ha protegido el cuerpo y lo ha hecho casto del que sólo la cara y las manos se pueden mostrar… entonces, qué puede hacer la mujer musulmana acerca de este desafío.
Debe rechazar ser ofrecida como un producto y debe estar en contra de la forma en que los medios masivos de comunicación la utilizan en la publicidad.
Las mujeres enfrentan campañas que recuerdan a la época de la trata de blancas en la que algunas bandas solían comerciar con los cuerpos de las mujeres, las comunidades islámicas deben rechazar toda forma de comercio como la trata de blancas o el uso del cuerpo de la mujer como un medio de publicitar un bien.

 

Conclusión

En estas pocas páginas tratamos acerca de algunos desafíos y problemas que enfrenta la familia en nuestra sociedad como resultado de la asimilación a la cultura occidental. El estatus especial acordado a las mujeres en las sociedades islámicas está basado en el Islam como una forma de adquirir el equilibrio entre los derechos y las responsabilidades del hombre, la mujer y los hijos.
Este equilibrio ha comenzado a desbaratarse a causa de la interferencia occidental, que retrata a la mujer musulmana como sometida y maltratada en nuestras comunidades islámicas y ha comenzado a alentarla a volverse en contra del patrón islámico, ha hecho sus primeros reclamos para lograr altos puestos en el estado, incluso la presidencia, los ministerios y los judiciales. Más importante que esto son los desafíos que están relacionados con su vida, su familia y llevar a cabo sus principales deberes.
Conservar un equilibrio entre los deberes laborales y familiares es difícil y la mujer en gran medida ha fallado, por estas razones la descomposición familiar se ha vuelto un serio fenómeno en nuestra comunidad islámica. La corrupción también ha aparecido en las relaciones entre hombres y mujeres, los matrimonios no oficiales se han incrementado, en los que ni el hombre o la mujer cargan responsabilidad alguna y sólo gratifican su necesidad sexual a través de esta relación, que ha impactado a su vez, en las prácticas sociales en general y en la familia musulmana en particular.
Cuando las mujeres alternan con hombres en el trabajo y en los lugares educacionales, genera muchos problemas, por lo que la mujer musulmana y la comunidad islámica estarían mejor sin eso. Soltería, corrupción, relaciones pecaminosas, divorcio y descomposición familiar se han vuelto los fenómenos sociales más importantes que rodean a la familia.
Por ello aguardo recomendaciones de esta conferencia que contribuyan a corregir la situación de la situación de nuestra vida social como resultado de la hegemonía occidental, la que nos plantea a través de las convenciones internacionales: “Permisividad ¿Desean más?”
Tanto Alhazar como la iglesia han rechazado reconocer las relaciones sexuales ilegítimas fuera del vínculo matrimonial, también han rechazado los matrimonios entre personas del mismo sexo, el aborto sin una buena razón justificada, determinada por los médicos, nuestras comunidades necesitan adherir fuertemente a las relaciones sociales y hallar soluciones al problema de la soltería y el desempleo e imbuir a los jóvenes de energías espirituales que emanen de las enseñanzas celestiales como así también de energías materiales para construir una vida sólida. Lo que es necesario son hogares adecuados para vivir que puedan ser afrontados por los jóvenes, a los que el gobierno y los capaces contribuyan para deshacernos de estos problemas.
Nuestras situaciones sociales necesitan estudios meticulosos que puedan reconocer el fenómeno e identificar el problema, para luego ofrecer una solución apropiada para el mismo, si no hacemos esto, la crisis de la época aumentará en torno a nosotros.
Lo último que me gustaría recomendar es el rechazo de la hegemonía occidental que elige destruir, no sólo a través de las fuerzas armadas y del poder económico, nuestra voluntad y religión, sino que elige interferir con la educación y con la vida socio- política con el pretexto que necesitamos reformas, mientras que ellos son los que necesitan seguir los pilares de una vida correcta ya que la mayoría padecen la descomposición social.


1 Muchos de nuestros hermanos y legisladores cultos repitieron algo que puede ser verdad, especialmente que todo bien que les llega es de Egipto, y lo mismo es válido para los males, su argumento en que cada innovación iniciada es comunicada por ellos a Egipto, tales como las leyes de la limosna y la herencia y la ley de desposesión y muchos estatutos personales. Esto sucedió en Líbano, Jordania y parcialmente en Siria.

2 Esta tendencia es claramente apreciada en los países del Golfo y Egipto. En Dubai está la Universidad de Zaid, en la que el medio de enseñanza es sólo en inglés, es una universidad para señoritas controlada por norteamericanos y lo he visto pora mis propios ojos. De este modo la elite del poder en Egipto está graduada en una universidad norteamericana.
La universidades privadas han adoptado la currícula de las universidades norteamericanas en tener al inglés como único medio para la enseñanza, Egipto permitió el asentamiento de universidades inglesas, francesas y alemanas y está fuertemente enfatizado el establecimiento de universidades que no se hallen relacionadas a estos países bajo el pretexto de su tecnología.

3 Una dura visión en jurisprudencia, y dominante entre los investigadores islámicos, durante la discusión legal, estableció que la voluntad del esposo es crucial para que el divorcio se lleve a cabo en caso de separación, basados en el hecho de que el Mensajero de Dios (La bendición y la paz sean con él y su descendencia) en el único caso de separación que le fue presentado, le pidió a la esposa que volviese al jardín que le fue dado a ella por su esposo y le pidió a él que se divorciase de ella, sin embargo el ministro de justicia optó por darle el derecho al divorcio en caso de separación al juez, sin interesar lo que el marido desee, por lo que él no tendría el derecho al divorcio.

4 Existe un caso expuesto al público en Egipto, el caso Hind Al- Hanwi, quien demanda que el hijo de un famoso artista egipcio se casó con ella y que tuvo un hijo de él. Ella, junto a su familia reclaman que existió un matrimonio no oficial, escrito en papel robad por el esposo. El esposo admite haber mantenido relaciones ilícitas con la demandante, ya que no se trató de un matrimonio. La corte se rehusó a probar que la criatura esté relacionada con él, sobre la base de la regla religiosa. El veredicto fue apelado, y existe una fuerte orientación pidiendo la necesidad de probar la relación por medio del diagnóstico de ADN, en lugar de los conocidos medios para probar la relación, esta es la manifestación de la asimilación a la cultura occidental que rodea a la familia musulmana en estos momentos.

 

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