El Rol en la Vida Islámica del Imam Hassan (A. S.)- Durante la Vida de su Padre

Jueves 20 de diciembre de 2012          AL- BALAGH FOUNDATION

 

El rol del Imam Hassan (a. s.) durante la vida de su padre, y especialmente bajo su califato, estuvo marcado por su total obediencia a su padre, que era su ejemplo y líder. Trató con él no solo como un amable hijo, sino también como un soldado obediente en el más profundo sentido de la palabra, con sus implicaciones de cumplimiento y disciplina. El rol del Imam Hassan (a. s.) estuvo expresado, durante todos los días críticos de su padre, que atravesó el Imam Ali (a. s.), con la total obediencia a su padre, su líder y la fuente de su inspiración.

A continuación se hallan algunos de sus actos durante esta parte de su vida:

A. Luego que el campamento del Imam Ali (a. s.) fuera atacado, debido al motín de Talha y al- Zubair, en la ciudad de Basrah, y luego del levantamiento de los desviados bajo el liderazgo de Mu’awiyah bin Abu- Sufyan, el Imam Ali (a. s.) sintió que necesitaba el apoyo de las masas de Kufah para proteger lo correcto y abatir la sedición llevada a cabo por algunas personas. Para esa misión, eligió a su hijo mayor, Hassan (a. s.). Le ordenó que anime al pueblo de Kufah a defender la pura causa islámica, representada por el Imam ali (a. s.). El Imam Hassan aceptó la misión y se dirigió a Kufah en compañía de Ammar bin Yasir, el Imam Hassan (a. s.) llevaba un edicto del Imam Ali (a. s.) para su gobernador en Kufah, Abu- Musa al- Ash’ari, relevándolo de su puesto debido a su desgraciada posición fallándole al Imam Ali (a. s.) y volviéndole la espalda a la verdad indisputable.

Tan pronto como ingresó a Kufah, las multitudes rodearon al Imam Hasssan (a. s.) declarando su lealtad y su presteza para ayudarlo. Hizo un discurso, en el que insufló entusiasmo a sus ineptas almas e instó al pueblo a elevar el estandarte de la Jihad. El Imam Hassan (a. s.) fue más que exitoso en el cumplimiento de su misión. Exhortó a apoyar lo correcto, defender el mensaje y su noble estado. 16

B. La batalla de al- Jamal (El Camello) ya había terminado en Basrah, Mu’awiyah estaba reuniendo rápidamente fuerzas sirias, estacionándolas en Siffin. El Imam Ali (a. s.) escuchó acerca de los movimientos del partido omeya. Divulgó las noticias entre sus soldados y los reunió en concilio. Todos anunciaron su presteza para hacer lo que el Imam Ali (a. s.) les ordenase.

Mientras tanto, el Imam Hassan (a. s.) estaba parado en el medio de la multitud convocándolos a que se reúnan alrededor de la verdad. En uno de sus discursos dijo:

“Gracias sean dadas a Allah. No hay otro dios más que él. No tiene igual. Lo alabo y Él es digno de alabanza. Allah os concedió grandes favores y  derramó sobre vosotros Sus gracias que están más allá de todo número. No es posible agradecerle por ellas. Ninguna afirmación o dicho puede expresarlas. Estamos furiosos en nombre de Allah. Él nos favoreció con aquello que no puede ser concedido sino sólo por Él. Debemos, por lo tanto, alabar Sus recompensas, tribulaciones y favores. Nuestra alabanza debe ascender a Allah, llevando nuestra satisfacción a Él. Debe ser verdadera. Nuestra alabanza tiene que ser tan auténtica que Allah nos crea. Nos tiene que hacer merecedores de recibir más retribuciones. Nuestra alabanza debe aumentar antes que disminuir los favores de Allah. Ningún grupo de personas se reúne por algún tema sin hacerlo más firme y su creencia sólida. Así que movilizaos para la lucha en contra de vuestro enemigo. Mu’wiyah y sus soldados, porque él avanzó contra vosotros. Y no os desalentéis unos a otros porque el desaliento corta separando las fibras del corazón. Avanzar bajo las puntas de las lanzas es señal de valentía y piedad, ya que nadie ha observado la Jihad sin el levantamiento del malestar de entre ellos por Allah. Él les otorgará las tribulaciones de la humildad y los guiará por los hitos de la denominación…” 17

En este discurso, el Imam Hassan (a. s.9 apuntaba a solidificar los lazos de la unidad, cerrar filas entre la gente y congregar al pueblo a desafiar el partido encabezado por Mu’awiyah y un puñado de oportunistas.

E. El Comandante de los creyentes, el Imam Ali bin Abu- Talib (a. s.), había advertido al pueblo en contra del arbitraje durante la Batalla de Siffin. Sabía que había una trampa. Luego que la charada del arbitraje terminó- y terminó con Abu- Musa al- Ash’ari fallando al Imam Ali (a. s.)- el campamento del Imam Ali (a. s.) se llenó de confusión. Prevaleció el caos y cada grupo de personas comenzó a separarse de los demás. Comenzaron a agraviarse unos a otros. El Imam Ali (a. s.) deseaba explicar a la gente cómo era la situación, y demostrar que el arbitraje era inválido porque no estaba basado en la verdad y en la lógica. Designó para esta tarea a su hijo Abu- Muhammad Hassan (a. s.)

“Ponte de pie, hijo mío, y habla acerca de estos dos hombres: Abdullah bin Qais18 y Amru bin al- Aas,” le dijo el Imam Ali (a. s.) a su hijo.

El Imam Hassan (a. s.) se puso de pie y se dirigió a la muchedumbre, diciéndoles el verdadero alcance de la situación. Dijo:

“¡Oh, pueblo! Habéis hablado mucho acerca de estos dos hombres. Sólo fueron elegidos para juzgar de acuerdo al Libro y bajo la luz de su guía. Pero, juzgaron de acuerdo a sus caprichos y no por el Libro. Al ser esto verdad, su veredicto no puede ser llamado un juicio. Antes bien, fue una opinión obligada por ellos. Abdullah bin Qais erró al nombrar a Abdullah bin Umar como califa. Cometió errores concernientes a tres puntos: Primero, está en desacuerdo con su padre que no lo considera calificado para el califato ni lo designó como miembro de la Shura (grupo consultivo). Segundo, no lo consultó en el tema. Y tercero, ni los inmigrantes ni los ansaríes (ayudantes) se reunieron con él. Estos son los que designan al gobernante y establecen su mandato sobre el pueblo. Por arbitraje, el propio Mensajero de Allah (s. a. w.) había escogido a Sa’d bin Ma’ath para eso. Y él juzgó lo que place a Allah. Sin dudas, si se ha desviado, el Mensajero de Allah (s. a. w.) no lo aprobará.”19

En estas palabras, el nieto del Santo Profeta (s. a. w.), el Imam Hassan (a. s.), aclaró el tema, descubrió la falsedad del arbitraje y demostró al pueblo el error de Abu Musa al- Ash’ari, que había sido elegido por el pueblo de entre el ejército del Imam Ali (a. s.) y sin pensarlo demasiado, le encargó una tarea que no podía cumplir. El hombre tenía malas intenciones.

El Imam Hassan (a. s.) demostró alguno de los errores de Abu- Musa. Entre ellos estaba la destitución del Imam Ali (a. s.) y la designación de Abdullah bin Umar bin Al- Khattab como califa de los musulmanes. Su juicio involucraba tres errores, por no mencionar el resto de su arbitraje. El Imam Hassan (a. s.) era un pensador astuto, tenía una sólida  base en lógica y política- Su análisis de las acciones de Abu- Musa en el proceso de arbitrio fue agudo y no dejó dudas en las mentes razonables que el análisis no tenía falta alguna.

Dijo que:

1. Cuando Umar bin al- Khattab designó a un grupo consultivo de seis hombres en su lecho de muerte, no designó a su hijo Abdullah entre ellos. Porque reconocía que si hijo no estaba calificado para ser califa y líder del pueblo.

2. La promesa de fidelidad, al ser el orden del día, fue iniciada por los inmigrantes y los ansaríes, luego, toda la ummah lo haría. ¿Cómo podría al- Ash’ari hacer algo sin consultarlos?

3. Al- Ash’ ari, al designar a Abdullah como el califa de los musulmanes, no buscó el punto de vista del propio  hombre. No podía decir si Abdullah aceptaría ose rehusaría. El hombre no estaba al tanto de la cuestión y no se le preguntó acerca de este tema históricamente crítico.

Además, el Imam Hassan (a. s.) sentó ejemplo de un justo y buen arbitraje, que es aprobado por Allah. Citó el arbitraje de S’ad bin Ma’ath, que fue elegido por el Mensajero de Allah (s. a.a w.), para resolver el tema de bani Quaridhah, después de la derrota militar por parte del Mensajero de Allah (s. a. w.). Su juicio fue firme y sólido.

4. El Imam Hassan (a. s.) tomó parte en todas las guerras llevadas a cabo por su padre, el Imam Ali (a. s.), incluida la de Basrah, Nahrawan y Siffin. Jugó un rol crítico en ellas. Peleó en esas batallas y puso fin a sediciones sin otros motivos más que su preocupación por el Islam.

Estas son algunas de las actitudes prácticas que fueron tomadas por el Imam Hassan (a. s.) durante la vida de su padre. Representan la primera etapa de su rol religiosos en la vida de los musulmanes.

 

16. Baqir Sharif al-Qarasi, Hayat al-Imam Hasan (a.s.), (Najaf: 1965), vol. l, p.387

17. Ibid., p.432.

18. Abdullah bin Qais is Abu-Musa al-Ash’ari.

19. Ibid., p.479.

 

Adaptado del libro: “Imam Hasan bin Ali (a. s.)” (“El Imam Hassan bin Ali (a. s.)”) de la “Al- Balagh Foundation”

 

Traducido por Fabiana Ríos, para UMMA, de:

http://en.rafed.net/index.php?option=com_content&view=article&id=10730:imam-hasans-as-role-in-islamic-life-during-his-fathers-lifetime&catid=84:seerah&Itemid

 

Filed in: Sin categoría

No comments yet.

Deja un comentario

Debes iniciar sesion para dejar un comentario.